Querido Blog, ¡que olvidado te tengo!

Querido blog, te pido disculpas. Cuantos días sin acudir a verte, sin tocarte, manipularte y saborearte. Han sido  meses de intenso trabajo, de no parar ni un instante para actualizarte, pero eso se acaba hoy. La actualidad me ha dado un respiro y en los próximos posts te contaré cuales fueron mis mejores experiencias. Son reportajes que tuvieron su particularidad, su repercusión y sobretodo su respuesta.

Tune Tune es una herramienta útil

La pasada semana descubrí una herramienta nueva y muy útil  para la edición de vídeos. Muchas veces cuando preparamos un montaje audiovisual necesitamos una música, o un sonido. Es en ese momento cuando solemos acudir a internet en busca de la melodía anhelada. La mayoría de las veces acabamos en you tube y en muchas ocasiones queremos bajarnos el audio de ese vídeo y no podemos.

Existe una web que se llama http://www.tunetune.net/ Os la recomiendo si tenéis esa necesidad. Es muy sencilla de utilizar y muy práctica. En tan sólo 3 pasos damos con la solución. Tan sólo tienes que decidir el vídeo en you tube donde está esa música. A continuación copias la URL del vídeo y la pegas en el espacio que te indica la web. Después pulsas la opción convertir y automáticamente el programa on line genera un archivo mp3 o de sonido para que lo puedas trasladar a tu programa de edición.

Una forma de dar con el sonido perfecto en nuestro vídeo. Espero haya sido de utilidad para todos.

Dos duras experiencias como periodista

Debe haber sido una casualidad, pero en menos de una semana me he topado con dos historias personales duras. Las dos con menores indefensos al frente. En ambos casos he dejado mi profesión a un lado y he preferido ser persona. Me consta que muchos colegas del gremio no ven con buenos ojos que dejemos de ser profesionales por un instante, pero yo, queridos míos primero soy humano y luego periodista.  No me gusta ver dolor a mi alrededor y si está en mi mano ofrecer ayuda, lo hago. En ambas noticias me he posicionado claramente y me importa un pito que me lluevan las críticas o me acusen de mal profesional.

La primera de las historias es la de Emilia Mora. Una abuelita valenciana a la que unos funcionarios, hace año y medio,  le quitaron la custodia de su nieto argumentando que el pequeño estaba en proceso de adopción. Guillermo siempre convivió con su abuela por los problemas de su madre y en ningún momento quiso separarse del calor de su yaya. La ley, sin corazón alguno, le arrebató a Emilia lo que más quería y hoy está anciana deambula de institución pública en institución pública exigiendo que por lo menos le dejen ver a su pequeño Guillermo. Hace unos días pude hablar con ella y este es el resultado.

Pocos días después, mi amigo y compañero en Las Provincias Joaquín Batista me habló de una familia de acogida que lo estaba pasando mal. Después de un año y medio cuidando de una niña de ojos azules eternos y abandonada por sus padres, la consellería valenciana de bienestar social decidía devolverla a su familia materna. Familia que la menor no conoce de nada y que está en Colombia, es decir a miles de kilómetros de su lugar de nacimiento, Valencia. Un proceso frío y numérico que ha roto por la mitad a sus padres adoptivos. Tuve la oportunidad de compartir con ellos su inquietud y malestar por lo mal que está organizado el sistema. Este es el vídeo.

Dos reportajes duros y en los que debes mirar a la cara a la persona que te cuenta su pena. Siempre tienes dos opciones. O miras a otro lado o decides implicarte por completo. Opto por la segunda. He movido por todos lados las historias para ver si alguien reacciona en la administración. He tenido buenas respuestas en redes sociales pero seguiré defendiendo lo que creo justo. Por ese motivo, hoy publico mi experiencia en el blog. Saludos

La profesión de Nacho Moscardó

Nacho Moscardó es interiorista. Una de las cosas que más me gustan de mi profesión es la posibilidad de conocer a mucha gente y sus quehaceres. Hace unos días contacte con Nacho, uno de los mejores decoradores de interiores de la Comunidad Valenciana. Durante unas horas formamos parte de su equipo de trabajo. Nos metimos en su estudio, viajamos con él e incluso asistimos a sus reuniones de trabajo. Cuantas más profesiones conozco, más me gusta mi trabajo. Aún así, si pudiera dedicarme a otra cosa no me disgustaría la idea de crear de la nada espacios agradables y cálidos. Es lo que hace mi amigo, desde hace unas semanas, Nacho Moscardó.