La noticia está en la calle

Voy a seguir insistiendo en la necesidad de alterar lo menos posible los mensajes audiovisuales para internet. Soy de los que opinan y defienden que los reportajes en la red de redes tienen que tener un planteamiento muy simple y natural. La realidad vista a través de una cámara puede tener diferentes escalas de manipulación. Yo me quedo para internet en el primer escalón. Cuanto menos manipulemos el mensaje original mucho mejor.

Sin duda es el camino más rápido entre la realidad y el espectador que la contempla. A los internautas en general les gusta sacar sus propias conclusiones, sin que nadie les cuente ni les guíe. Forma parte de la filosofía natural de la navegación por web. Nuestro éxito está garantizado si dejamos que los hechos ocurran, suenen y se manifiesten tal y como son.

La calle está llena de historias audiovisuales para internet. El siguiente es un ejemplo muy evidente de ello. Los mercadillos de las ciudades son un entorno magnífico para conseguir historias urbanas, atractivas y que capten la atención de quien las ve. Programas como callejeros de Cuatro han dado con la fórmula del éxito. Telerealidad servida como reportaje.

Hace unas semanas en Valladolid, con los periodistas del Norte de Castilla cogimos una cámara y nos marchamos al mercadillo del barrio de las Delicias. Hablamos con los principales vendedores, los que más tiempo llevaban en la zona. Sus declaraciones en sus propios puestos de venta fueron combinadas con las escenas reales que allí vivimos. Vendedores a voz en grito ofreciendo su producto.

Un consejo más. Siempre es recomendable empezar el reportaje con secuencia o escena que capte nuestra atención. El de este reportaje no tiene desperdicio. Espero que os guste.